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ENRÍQUEZ LIRIA
et al
. : Aspectos ecológicos de la plaga
Diaphorina
citri
Figura 1. Fluctuación poblacional de
D. citri
por mes en Villa Altagracia, período febrero-agosto del 2013.
Los diferentes patrones espaciales de
D. citri
encontrados enVillaAltagracia, probablemente
se debieron a las densidades poblacionales de los adultos y la abundancia de brotes tiernos en
el cultivo, los que podrían ser vitales para el desarrollo y alimentación de los inmaduros de
D. citri
, pudiendo influir la cantidad de brotes tiernos de un cultivo en las densidades
poblacionales del psílido (Dharajothi
et al
., 1989; Tsai y Liu, 2000; Tsai
et al
., 2002; Halbert y
Manjunath, 2004; Hall
et al
., 2008 y Qureshi
et al
., 2009). Además, en este campo aunque los
árboles están afectados con el HLB y recibieron los efectos de un prolongado período de sequía
durante nuestra investigación, se aplica un manejo constante del cultivo (riego y podas del dosel
de los árboles constante, nutrición periódica de las plantas y el reemplazo de plantas viejas por
jóvenes. Esto favoreció la producción y la alta densidad de brotes tiernos, creándose condiciones
favorables para el incremento de las poblaciones de adultos de
D. citri
por todo el cultivo.
En El Seibo, los patrones espaciales de
D. citri
, también se vieron afectados por la
abundancia de brotes tiernos presentes en los árboles. Aquí se observó menor densidad de brotes
tiernos que en Villa Altagracia, debido probablemente a que las plantas en este campo están
altamente afectadas por el HLB, no se aplica un manejo agronómico en este cultivo y a que la
prolongada sequía pudo provocar que las plantas disminuyeran su capacidad de producir brotes.
Estas condiciones desfavorables en todo el cultivo, pudo disminuir las densidades de adultos de
D. citri
y provocar que estos se desplazaran hacia otros árboles en busca de condiciones más
favorables, promoviendo un patrón espacial agregado de los mismos.
Dinámica poblacional de D. citri en Villa Altagracia y El Seibo
.
Diaphorina citri
estuvo presente
durante todo el período de estudio en las localidades seleccionadas. En Villa Altagracia, las
mayores densidades poblacionales de la plaga ocurrieron durante febrero, marzo, mayo y agosto
(Fig. 1). En El Seibo, las poblaciones de adultos de
D. citri
fueron mayores durante abril y junio
(Fig. 2).